No es la primera vez que hablamos de dinero sucio en sentido literal. Remo nos traía una infografía en la que el 64% de los europeos consideran poco higiénico el dinero físico. De ahí que no resulte nada extraño la necesidad de lavarlo por motivos de salud, pero también financieros.
Curiosamente los muñidores de la infografía eran los amigos de Mastercard, que lógicamente barrían para casa propugnando la tarjeta como un medio más limpio, especialmente la contactless. Hacen bien, ya que tampoco las tarjetas son que digamos muy limpios.
Si a esto le sumamos el hecho cierto de que periódicamente los billetes más deteriorados por dicha suciedad y desgaste son retirados por los bancos centrales y reimpresos, no es extraño que se estén investigando distintos métodos para la limpieza del dinero, como por ejemplo con dióxido de carbono, algo que en algunos países agradecerán especialmente.
Entiendo a los amantes del dinero físico, pero yo cada vez lo tengo más claro.
Vía | cienciaxplora
Más información | ACS
Imagen | Images Money