Así es el brutal batacazo económico que se está dando Brasil

Así es el brutal batacazo económico que se está dando Brasil
37 comentarios

En este nuevo artículo voy a analizar la evolución económica que ha tenido en los últimos años una de las economías emergentes más grandes del mundo. Brasil, es la octava economía del mundo, en términos de PIB, país que se benefició en gran medida de la alta subida de los precios de materias primas a lo largo del 2000, como uno de los principales exportadores, y que empezó a entrar en recesión a partir del 2014, hasta llegar a una caída del 3.8% de su PIB en 2015 lo que implica la mayor recesión económica de Brasil en el último cuarto de siglo.

Analizaremos todas las causas internas y externas que han llevado a Brasil a esta depresión económica, así como otros aspectos relacionados, tales como todos los casos de corrupción del gobierno de Dilma Rousseff o Lula Da Silva, a través de la manipulación de las cuentas estatales, o de la empresa petrolera semi-pública Petrobras. De hecho que el índice de percepción de la corrupción que desarrolla la Organización para la transparencia internacional, ha degradado a Brasil al puesto 76 de los países menos corruptos del mundo (del total de 167 países analizados).

El auge económico de Brasil a principios del siglo XXI

Brasil Corcobado

Una de las claves que debemos tener en cuenta para entender el declive económico de Brasil, es entender el auge adquirido en los primeros años del siglo XXI, así como entender las causas y factores que generaron dicho crecimiento.

El crecimiento económico de Brasil entre 1998 al 2002, no fue muy alto, en torno al 1.7% del PIB, pero dicho crecimiento se elevó entre el 2003 al 2009 en torno al 4.1% del PIB de media. Los motivos fueron las políticas de su entonces presidente Luiz Ignácio Lula Da Silva, que generó más estabilidad económica, mediante un incremento de gasto público que redujo la tasa de desempleo de un 10.5% a un 5.7% en el 2010. Aspectos de este incremento de gasto público vinieron dados por ayudas sociales como ¨Bolsa familia¨, donde el estado repartía ayudas mensuales a las familias de 80 dólares, permitiendo que 29 millones de personas salieran de niveles de pobreza, y así consolidar una clase media, que representaba el 51% de la población total. Por otro lado cuadriplicó el gasto en educación permitiendo la creación de 14 universidades nuevas, así como el acceso a la universidad de unas 1.300.000 personas. Por no hablar, de la preparación de unos mundiales de fútbol en 2014, o unos juegos olímpicos en 2016.

A todo esto hay que añadirle un incremento en la facilidad de adquisición de crédito por parte de las familias que aumentó el consumo y la inversión del país. Financiación a través de unos tipos de interés que no eran realmente bajos, pero sí históricamente más bajos. Simplemente con un análisis rápido de los tipos de interés aplicados por el Banco Central de Brasil a lo largo de los últimos 20 años, vemos que los tipos de interés han fluctuado de un máximo del 45% en marzo del 1999, hasta un mínimo de 7.25% en Enero del 2013, siendo el tipo de interés actual del 14.25%. (Ver gráfico abajo)

Screen Shot 2016 06 16 At 22 15 21

Como sea, la tendencia bajista es patente en este tramo temporal, lo que ha permitido una financiación relativamente más baja. Como se ha visto en otros economías y países, un abaratamiento del crédito y una mayor facilidad del endeudamiento genera un impacto amplio en toda la economía, y especialmente en el sector inmobiliario. Por ejemplo, el precio de la vivienda casi se cuadriplicó en Sao Paulo desde 2008 al 2015 en términos reales, alentadas por los tipos de interés históricamente bajos en Brasil.

¨El crecimiento económico de Brasil de principios del siglo XXI ha venido dado por un incremento del gasto público, por políticas estatales de redistribución de la renta, incremento del consumo e inversión mediante el endeudamiento, así como su floreciente comercio exterior de materias primas y los elevados precios del crudo en los mercados¨

Finalmente, otro de los motores del crecimiento económico brasileño ha sido el aumento de valor de las materias primas en la primera década del siglo XXI. Brasil es uno de los máximos exportadores de metales industriales, petróleo y soja, entre otros.

En lo referente al mercado exterior brasileño, de principios de siglo hay que considerar dos parámetros importantes. El elevado precio del petróleo en torno a los 120$/barril, antes de la aparición de la técnica del fracking y su consecuente bajada de precio en los mercados.

Por otro lado la expansión económica de China antes que cambiara su modelo económico, siendo este el principal cliente de los brasileños. Todo este fértil comercio exterior brasileño, permitía un gran volumen de entrada de divisa extranjera, apreciando así el real brasileño. Es conocido que el real brasileño se apreció un 108% con el dólar desde 2003 al 2012, debido a su floreciente mercado internacional y exportaciones de materias primas, el crecimiento económico interno que se dio prácticamente hasta el 2014 consiguiendo su incremento más alto del 7.5% del PIB en 2010, que permitía una atracción de capitales hacia Brasil, especialmente porque el resto de bloques económicos estaban en recesión económica, la progresiva subida de tipos de interés para paliar los altos niveles inflacionistas que estaba provocando todo ese crecimiento del mercado interno, atraía a ahorradores e inversores de otras partes del mundo, así como las buenas clasificaciones proporcionadas por las agencias de rating hasta el 2014 como otro aval para la entrada de capitalización.

Por otro lado, Brasil tiene una carga fiscal en torno a la media de los países de la OCDE, esto un 35% de su PIB. En la época, en la que los precios del crudo estaba entorno a 110-120$/barril, el impacto en la recaudación fiscal era amplio, con un volumen de ingresos fiscales que permitía financiar su gasto público, de forma que arrojaba superávit primario (diferencia entre ingresos públicos y gasto público, excluyendo gastos financieros de deuda), es decir los déficit finales obtenidos, se deben a los elevados cargos de los gastos por intereses de financiación de su deuda. (ver datos debajo).

Screen Shot 2016 06 16 At 18 42 50

El gráfico de abajo muestra el desglose entre el superávit primario y el déficit fiscal, debido a los gastos con intereses de deuda desde el 2007.

Screen Shot 2016 06 19 At 12 14 22

Declive económico de Brasil

Es importante en cualquier análisis económico, saber de donde se viene, para entender a donde se ha llegado, e incluso estimar hacia donde se puede ir. En el apartado anterior, he explicado de forma muy genérica cuales han sido los parámetros que han generado todo el crecimiento económico. Sin embargo, en este apartado voy a explicar los factores a considerar que ha generado la debacle, y el porqué de su caída del 3.8% del PIB en el 2015, y de otro 3.8% estimado para el 2016. Definamos dos tipos de factores, los endógenos y por tanto dependientes de la política monetaria y fiscal de Brasil y los exógenos, dependientes de las políticas de otros países pero que han impactado de lleno en la economía brasileña.

Factores endógenos:

  • La estimulación del consumo e inversión internas mediante políticas de gasto público y endeudamiento. En principio, puede parecer buena idea incrementar las partidas de gasto público para estimular el consumo privado y la inversión pública, o facilitar crédito que incentive la demanda agregada de una economía e inversión privada. Son medidas económicas expansivas, pero cierto es, que todo obedece a un equilibrio, y dicho equilibrio se mide por la inflación de precios, la cual se ha disparado desde el 2014 (actualmente se encuentra en torno al 10%), desincentivando los salarios reales de los brasileños, así como su poder adquisitivo de forma gradual, lo que retrae el consumo de bienes y servicios. Por otro lado, ese incremento inflacionista se ve paliado con una subida progresiva de los tipos de interés, lo que que implica una mayos carga financiera de la sociedad endeudada, reduciendo consecuentemente la renta disponible y su propensión marginal a consumir.

  • Por otro lado, la inversión privada se ve dañada, ya que por un lado esa caída del consumo, frena las expectativas de inversión, la subida de los tipos de interés, encarece la financiación de la misma, y por último los incrementos inflacionistas, descapitalizan en términos reales, a familias y empresas.

  • La reducción del consumo y de la inversión, ha incrementado la tasa de desempleo, en torno al 8.2% en Febrero del 2016, lo que impacta a su vez negativamente en el déficit, ya que incrementa el gasto público con el aumento de las prestaciones de desempleo (estabilizadores automáticos del déficit), y una pérdida acorde de los ingresos públicos por impuestos, retenciones fiscales y gastos sociales de esos empleos que ya no existen.

Estos vienen a ser los parámetros económicos que marcan el declive económico interno en Brasil, y que dibujan uno de los escenarios económicos más temidos por políticos y economistas, la estanflación. Este término viene del término inglés ¨stagflation¨, y se produce cuando en una economía se da inflación de precios y desempleo a la vez. Para demostrar de forma física lo que estoy explicando, fíjense en esos dos gráficos de abajo. Se refieren a la evolución de la inflación y el desempleo en Brasil en los últimos años.

Screen Shot 2016 06 16 At 20 10 22
Screen Shot 2016 06 16 At 20 10 00

Los datos demuestran una clara tendencia alcista de ambos macroeconómicos desde 2015 hasta nuestros días.

Por último, el único elemento del PIB brasileño que se mantiene en ascenso es el gasto público, en torno al 10.30% en 2015, el más alto en los últimos 15 años (ver tabla en la sección anterior de este artículo), lo cual implica un incremento de la deuda externa, y esto unido a la caída del PIB en 2015 del 3.8%, haya disparado el ratio de deuda sobre el PIB al 70% en 2016, el más alto de Sudamérica, por encima del ratio de Venezuela (53%), o Ecuador (37%). Uno de los motivos de este incremento de gasto público, se debe entre otras cosas, a la inversión necesaria para los juegos de Río 2016.

Por otro lado, la única ventaja por parte del gobierno brasileño que puede obtener de una alta inflación , es que dicha inflación reduce la deuda externa en términos reales, pero del mismo modo que reduce los salarios reales, beneficios reales de empresas, o los ahorros de familias y empresas.

Screen Shot 2016 06 16 At 20 43 33

Factores exógenos:

Como decíamos antes, estos factores son aquellos que depende de factores independientes al gobierno de Brasil, pero que impactan en la economía brasileña.

  • La caída del precio del crudo en los mercados: Uno de los productos que más exporta Brasil es el petróleo, y como es sabido su precio se ha desplomado en los mercados en los últimos meses. Un precio que ha pasado de los 110$-120$/barril a 47$/barril a día de hoy, llegando a mínimos en torno a 30$/barril. Obviamente este desplome tiene su impacto negativo en la economía de Brasil, un importante exportador. El inicio del cambio se produjo cuando empezó a surgir en EEUU las explotaciones petrolíferas mediante la fractura hidráulica (fracking), con unos costes de producción por barril de entre 60$ a 80$/barril, la estrategia seguida por países de la OPEP, especialmente Arabia Saudí fue no reducir el volumen de producción para que bajara el precio. Arabia Saudí tiene un coste de producción por barril de unos 20$, por tanto tiene margen suficiente para bajar el precio sin incurrir en pérdidas y así hacer que sus exportaciones sigan siendo competitivas con el fraking estadounidense. Esto unido a la eliminación del embargo a Irán, país que ha aportado un incremento en la oferta petrolífera global, ha provocado una escalada bajista en los precios del crudo a nivel mundial. Por otro lado, la ralentización económica mundial, especialmente en China que ha reducido la demanda de crudo global, y por último el creciente peso específico que están teniendo las energías renovables como un sustituto del petróleo. Dichas energías renovables están incrementando su capacidad energética, a unos costes de producción más bajos gracias a los avances tecnológicos, y dicha tendencia continua. La energía solar ha reducido su coste en un 80% desde el 2008, y ha incrementado su capacidad energética en un 85% a nivel mundial. . Es sin duda un período de transición energética, del mismo modo que a mediados del siglo pasado se pasó del carbón como primera fuente de energía al petróleo. Ahora la transición se dirige hacia las renovables. Simplemente, el petróleo está cerrando un ciclo.
Screen Shot 2016 06 16 At 21 44 17
  • El cambio de modelo económico chino. Este ha sido otro de los grandes impactos negativos en la economía brasileña, cuando China decidió cambiar su modelo económico, basado inicialmente en el sector industrial, y enfocado a las exportaciones, a un modelo con mucho más peso específico en el sector servicios y con un enfoque basado en la economía interna, más que las exportaciones. Para ello, China devaluó su moneda hasta tres veces consecutivas en Agosto del 2015, para proceder con dichos cambios. Esto produjo un impacto altamente negativo en todas las economía emergentes, que basaban gran parte de su desarrollo económico en las exportaciones a China, su principal cliente. Obviamente, Brasil no iba a ser menos, encarecieron sus exportaciones de un día para otro, de ahí se debe en gran medida, su caída del 3.8% de PIB en 2015.

  • Por último, mencionar que las tres agencias de ´rating´ más poderosas y con más influencia del mundo, Moodys, Standard & Poor y Fitch han devaluado el rating brasileño desde ¨Grado de Inversión¨, a ¨Grado de Especulación¨ desde el 2014 a nuestros días, lo cual ha empujado a una salida de capitales del país de forma considerable.

Corrupción en el gobierno de Brasil

Brasil Corrupcion

Esta es la situación actual de Brasil previamente explicada, escenarios estanflacionistas, caída del precio del precio de las materias primas en los mercados internacionales, devaluación del real brasileño, subida progresiva de los tips de interés, etc..Bien, a todo esto le debemos añadir el marco de corrupción en el que se está moviendo el gobierno de Dilma Rousseff, actualmente en el famoso ¨Impeachment¨, que no es más que un juicio político, desarrollado por la cámara baja y alta de las cortes brasileñas. Los cargos son varios, desde soborno y desviación de capitales públicos a través de la petrolera Petrobras, a manipulación y distorsión de las cuentas públicas estatales. Cierto es, que este no es el mejor escenario político-económico para desarrollar unos juegos olímpicos en un mes y medio.

Petrobras, es una empresa semi-pública con una participación mayoritaria del gobierno brasileño. La empresa es la cuarta petrolera más grande del mundo, y es la empresa más grande de América latina por volumen de ventas desde el 2009, por delante de la mejicana PEMEX o la Venezolana PDVSA. La empresa produce 2 millones y medio de barriles diarios.

La trama corrupta no es muy difícil de entender, había un conjunto de contratistas que pujaban para desarrollar projectos para Petrobras, y dichos contratistas fluctuaban en un entorno de pseudo-competencia. Es decir, hacía como que competían para la adquisición de concesiones de proyectos para Petrobras, pero estaba todo amañado previamente, desde el precio, el cual estaba ¨inflado¨, hasta quien se llevaría la concesión, etc... Luego se repartían las comisiones previstas, en torno a un 3% del valor del contrato entre funcionarios, políticos y demás entes involucrados, descapitalizando la empresa pública, en favor de empresas privadas. Todo esto ocurrió cuando Lula Da Silva era presidente de Barsil, y Dilma Rousseff ministro de Energía. El club de contratistas que pujaban por dichos proyectos, era limitado y no permitían que otras empresas pujaran por dichos dichos proyectos, para que pudiesen ¨repartirse el pastel¨ entre ellos mismos. Las comisiones cobradas entre políticos y funcionarios públicos eran blanqueadas a través de negocios legales, como hoteles o gasolineras, y posteriormente el dinero era enviado a través de ¨empresas falsas¨, a cuentas en China. Se sabe que ha habido miles de millones de reales brasileños saliendo de Petrobras hacia manos privadas, a través a toda esta trama corrupta.

El ¨impeachment¨en Brasil es el juicio político por el cual Dilma Rousseff está a día de hoy, fuera del cargo durante 180 días desde Abril del 2016, para deliberar por parte del Senado brasileño, su permanencia en la presidencia de Brasil. Dicho proceso empieza con la validación de las 2/3 partes del congreso de los diputados, posteriormente debe ser avalado por las 2/3 partes del Senado. Una vez avalado por el Senado, el Presidente se aparta de los cargos por un periodo máximo de 180 días, para la deliberación del caso, y si las 2/3 partes del Senado está de acuerdo con la destitución del Presidente, la persona en cuestión deberá dejar el cargo.

No se avecinan buenos tiempos para Brasil, una fuerte crisis económica, un gobierno corrupto, una presidenta destituída provisionalmente del cargo por un juicio político, y unos juegos olímpicos a la vuelta de la esquina...veremos en qué acaba todo!.

Temas
Comentarios cerrados
Inicio