Los mercados financieros llevan una temporada bastante estable en cotas cercanas a los 10.000 puntos, ¿pero por qué no suben más?, ¿se habrá estancado la bolsa?; la respuesta es más sencilla que todo eso y viene dada por la propia confianza que tienen actualmente los propios inversores y vienen relacionada muy directamente con los famosos brotes verdes.
Como podemos apreciar la sucesión de rebotes que se llevan sucediendo las últimas semanas es una muestra indiscutible de que el propio mercado no sabe realmente lo que quiere, pero es algo evidente ¿realmente sabemos si los brotes verdes son reales?. El sentido de ésta situación hace pensar que un primer momento el IBEX35 poseía una clara tendencia alcista, pero ha llegado un momento de parón y duda, de recapacitación para saber si de verdad es el tiempo exacto de invertir o simplemente la burbuja podría estar volver hinchándose.
Como podemos ver en el gráfico se ha mantenido en valores bastante estables durante las últimas semanas, cuando parecía que iba a superar los 10.000 puntos, se daban caídas rondando el 3% que demostraba que realmente es una cuota que el propio mercado no confía en superar.
Muchas preguntas son las que debemos hacernos: ¿los datos macroeconómicos como la contracción del PIB o el nivel de desempleo están influyendo?, ¿serán superados los 10.000 puntos a corto plazo? y aún más importante ¿si se superan, será algo real o una simple ilusión de confianza?.
Evidentemente los datos macroeconómicos si han de influir, el análisis técnico cuenta en sus fuentes de información con un fuerte apartado mediático, por lo que podía ser una de las posibles motivaciones para que los inversores en vista de verse cercanos a un punto máximo cercano a los citados 10.000 decidan vender; es miedo escénico y posibilidades de conseguir vender algo en un máximo actual, un buena venta sin duda para los momentos en los que nos encontramos.
No se sabe realmente si estos rebotes serán superados a corto plazo, desde luego revisando las cifras todo indica a que habiendo acabado en máximos el viernes pasado, este lunes debería repetirse la tónica y bajar hasta los 9.500 puntos, pero como todo en bolsa no es algo fiable hasta que no ocurre y hacer cualquier predicción sería aventurar demasiado y más actualmente.
En cuanto a la confianza inversora, ha quedado refrendado que existe, la subida desde valores muy inferiores ha sido fugaz y ahora no saben bien si es momento de invertir o no por eso los rebotes tan claros que casi forman una figura con forma de hoja de sierra.
La resolución no se hará mucho esperar, en mi opinión será cuestión de semanas, a lo sumo, que el mercado vuelva a bajar o que definitivamente el índice escale el tope que parece que nadie quiere superar: los 10.000 puntos.
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