En estos momentos complicados, muchos están perdiendo el trabajo.
Hay empresas buscando reducir sus gastos, desgraciadamente, muchas empiezen con los gastos laborales. Por otra parte, muchas se aprovechan de la coyuntura para tomar decisiones difíciles que deberían haber tomado antes.
No obstante, siempre hay que estar atento a las indicaciones de que el puesto de trabajo de uno puede estar en peligro.
Hay temas internos que uno tiene más posibilidad de controlar o influir y debemo estar atentos a las señales, por si nuestas actuaciones pueden modificarse para tener en cuenta la situación que se ve avecinar. Algunas de estas incluyen:
- En la revisión periódica te dan mala nota o una advertencia.
- Tu jefe empieza a revisar tu trabajo más de cerca.
- Los compañeros te empiezan a ignorar.
Por otra parte, hay acontecimientos externos que pasan, que están fuera de nuestro control y que son más difíciles de influir. Algunos de estos son:
- Viene un nuevo jefe.
- Se cambia la dirección de la empresa.
- Hay rumores de reestructuración o reducción de trabajadores.
- Las nuevas contrataciones no siguen el modelo de antes.
No obstante, incluso cuando los movimientos que se ven son externos, no debemos quedarnos con los brazos cruzados y esperar a que las decisiones se tomen sin nuestra participación.
Hay cosas que se pueden hacer, por ejemplo, tratando con un nuevo jefe.
Vía | Monster (en inglés)
En El Blog Salmón | Cinco pasos para mantener tu trabajo y Cinco señales que tu trabajo está en peligro